Estamos en camino de
estrenar “otra reforma educativa”, nueva
ley: la LOMCE.
Somos uno de los países que más leyes tiene en terreno
educativo, leyes orgánicas, reales decretos, decretos, ordenes, instrucciones,
resoluciones.
Un maremágnum de normas, con programas apretados y cambiantes
nos hace perdernos en burocracias.
El baile de la yenca
en política, nos hace bailar al son que cada uno toca,
y pocos planes
educativos llegan a su fin.
Y lo más curioso
es que si te asomas a las aulas,
entre tanto cambio,
lo primero que
percibes es que ¡poco ha cambiado la
cosa! desde que nació la escuela por primera vez,
y lo que sí está
claro es que la sociedad y nuestros niños
nada tienen que ver
con la de entonces.
Aprendemos todos, es un proyecto que nace del deseo de redefinir
una nueva forma de ver y educar al niño, el próximo 30 de noviembre, 1 y 2
de diciembre en Madrid hacen su tercer congreso.
Estas nuevas
miradas significan abrir puertas a
pedagogías que hagan posible que aparezca el brillo de cada uno y que no sean un camino inevitable a la
uniformidad que deja a tantos fuera de la educación, especialmente en nuestro
país.
Confiemos que Wert
aparezca por allí…
Una preciosidad. Gran trabajo el de Aprendemos todos. Una nueva educación es posible (y urgentemente necesaria). Si quieres te enlazo en mi blog para dar difusión al vídeo...
ResponderEliminarGracias por acercarnos esta joyita. Un beso Marta!
Gracias David!
ResponderEliminarpor mí estupendo que lo enlaces!!
Otro beso!!
Hace falta una revolución en las aulas. me hace gracia eso que dices de que no han cambiado tanto las cosas en la enseñanza. En un curso de pedagogía uno de los profesores dijo algo que se me quedó grabado, algo así como que si hubieran congelado a un médico y a un profesor de principios del siglo XX y los descongelaran ahora y los pusieran en un hospital y en un colegio actual, el médico no sabría dónde estaba ni podría hacer nada y el profesor simplemente miraría a los alumnos y empezaría la clase.
ResponderEliminarDura misión a la que os enfrentáis los docentes en este momento. Espero de verdad que lo consigáis.
Besos
Dorothy, tengo que decir, en nombre de un número de compañeros (aunque tristemente no es un número significativo) que muchos sí han cambiado. Te encuentras profesores en la vanguardia de la educación y da gusto entrar en sus clases y aprender de ellos.
ResponderEliminarMás gusto da, ver a los alumno como aprenden y como se entusiasman al mismo tiempo.
Lo que no termino de entender porque esos maestros o profesores son tan anónimos y nada más se oye y se ve a los que como tu bien dices si los hubieran congelado y vuelto a traer empezarían las clases sin más, entre ellos al señor Wert, aunque éste pocas clases o para ser exactos NINGUNA en las enseñanzas obligatorias.
Inspirador aunque creo que es necesario incluir a la familia de una manera auténtica, no solo en el papel, para ese motivo estoy diseñando una nueva forma de unificar a los tres pilares de la educación, a saber: padres, hijos y profesores, si os parece interesante os dejo el link donde amplio información http://www.agctutores.es
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